Los teléfonos celulares han revolucionado la forma de comunicarnos. Antes las conversaciones vía telefónica eran las más frecuentes para comunicarse, pero ahora la mensajería instantánea y los mensajes de texto (SMS) han desplazado a las llamadas telefónicas.
Un estudio realizado en la Universidad de Michigan (EE.UU.), demostró que las personas son más propensas a decir la verdad y a revelar información delicada a través de los mensajes de texto (SMS) que en conversaciones con voz, a pesar de que saben que la información queda almacenada en la nube o en el teléfono y puede ser vista por otra persona.
La explicación es la siguiente, cuando las personas escriben un mensaje de texto, se pueden tardar más tiempo en responder que cuando los hacen conversando por teléfono o en directo. Al tener más tiempo para pensar lo que se va a responder, las respuestas son más precisas y sinceras.